sábado, 31 de marzo de 2012

A VUELAPLUMA (XLV)

¿Renunciarías a todo para acompañarme en mi locura? Yo sí renuncié a mi locura para acompañarte.

***

La primera vez que me dijo que me quería fue el día que nos despedimos.

***

No sé qué me produce más dolor. Si estos meses sin noticias de ti o el aluvión de cartas tuyas de esta última semana…

viernes, 30 de marzo de 2012

Ojalá te pierdas lo suficiente
en un lugar donde no pueda volver a verte,
desde el que no me lleguen noticias tuyas
y mis oídos permanezcan sordos al sonido de tu risa.

Ojalá te escondas de mí tan bien
que no pueda encontrarte nunca más
en los amaneceres perezosos
que remolonean en los brazos de la luna.

Ojalá huyas de mi vida para siempre,
que deje de ser este infierno en el que vivo,
que alguien ocupe el lugar que nunca quisiste para ti
y así mis brazos puedan volver a ser un hogar.

Ojalá llegue pronto el día en el pueda dejar de engañarme,
en el que pueda dejar de soñarte,
en el que quiera dejar de amarte…

jueves, 29 de marzo de 2012

UNA PÉSIMA COMPARACIÓN, PERO A MÍ ME VALE

Imaginemos que nuestra vida, nuestros afectos, funcionan como una ciudad. Las personas que entran y salen de nuestras vidas ocupan los barrios que quieren o los que dejamos que ocupen. El centro, el corazón, sería el lugar más importante y en el que menos habitantes habría. Es el distrito que reservamos para aquellos que queremos que sean los más importantes en nuestra vida. Y al que alguno llega para quedarse una temporada o para siempre. El barrio limítrofe con el centro sería el que reservamos para aquellos que, aun siendo importantes, no les tenemos reservado un lugar preeminente, pero están cerca de ser casi imprescindibles. Y, así hasta las afueras.

Imaginemos que a alguien de los que aparece en nuestra vida, bien porque lo hayamos buscado, bien porque fue quien nos encontró, o, simplemente, llegó por casualidad, por accidente o porque así estaba escrito, le reservamos uno de los mejores apartamentos del centro. O que le dejamos elegir dónde quiere quedarse porque no quiere vivir en el centro porque le asusta, o no le gusta, el bullicio que suele haber. Pero les decimos que ocupen el lugar donde más cómodos puedan estar, o el que ellos prefieran pero que sea cerca del centro, el tiempo que quieran vivir en nuestra ciudad. Y, para nuestra desgracia, escoge irse a las afueras, donde nuestro calor no le alcanza y terminaremos perdiéndole de vista.

Pues de una manera parecida funciona cuando somos nosotros los que llegamos a una ciudad nueva. Solo que, en vez de acomodarnos nosotros donde nos gustaría, nos marcan el lugar donde debemos vivir. Y, hay veces, que nos expulsan del barrio donde nos gustaría vivir, e, incluso, nos destierran de la ciudad donde querríamos quedarnos, dándonos igual el barrio en el que dejaran que habitáramos.

Así estoy ahora. Con la mejor vivienda del centro de mi ciudad, deshabitada, la que tiene mejores vistas sobre toda mi vida, sin nadie interesado en ocuparla, y buscando un lugar donde me acepten y pueda quedarme.

miércoles, 28 de marzo de 2012

EL MILLÓN DE COSAS QUE NUNCA LE DIJE

Ahora que ya ha pasado el tiempo suficiente y ha aplicado su barniz sobre mis recuerdos haciéndolos más amables, menos dolorosos y, aprovechando que ya no vamos a volver a vernos y todos los canales de comunicación se cerraron para siempre, puedo reconocer que me quedaron un millón de cosas por decirle. Que la quise. Que la quiero. Que la querré. Ayer. Hoy. Mañana. Siempre. Que tan seguro estoy de ese sentimiento que hasta pensé hacerme una escarificación con su nombre para que todos lo vieran, yo que tanto detesto atarme a un nombre. Que la única persona con la que quise compartir tiempo y espacios fue con ella, traicionando a mi soledad. Que quien despertó en mí el sentimiento de paternidad, si es que existe, fue ella. Que con ella hubiera querido tener uno, dos, todos los hijos que vinieran. Que hubiera sido capaz de detener el tiempo y que siempre fueran la 1:27 a.m. de aquel bendito día. Que hubiera prendido fuego a la lluvia para que no resbalara al pasear. Que hubiera convocado a todas las tormentas las tardes de los domingos que me lo hubiera pedido. Que hubiera espantado al frío. Que haría que el sol saliera todos los días solo para ella. Que, traicionando una vez más mis promesas, le hubiera compuesto la canción, y cien más, que aquella primera noche de aquella primavera tardía prometí escribirle. Que ella siempre estará en mis calles. Que ya sé que nunca estuve ni apareceré en su mapa, pero que me hubiera conformado con estar tan solo en el doblez que utiliza para marcar la página…

Me quedaron un millón de cosas por decirle... Lástima que ya no esté cerca para escucharlas. Aunque la única verdad de todo lo que nunca le dije es que yo solo quería llevármela a la cama y que fuera una muesca más en el cabecero.

martes, 27 de marzo de 2012

MATEMÁTICAS

Recuerdo momentos felices.
Tú.
Yo.
En la orilla.
Desnudos.
Hombro con hombro.
El mar lamiendo nuestros pies.
Ruborizándonos.
Unos labios impetuosos buscando otros llenos de deseo…

Recuerdo horas más felices.
Yo,
más
tú,
queriendo hacer un nosotros.
Sonrisas al amanecer.
Risas entre las sábanas.
Nuestros cuerpos bañados en el sudor reciente del amor urgente…

Recuerdo días más felices.
Tú.
En mis manos.
Yo.
En tus ojos.
Saboreando nuestros mundos.
Dos amantes ahítos, pero insaciables…

Recuerdo un tiempo en el que fuimos felices.
Nosotros.
La división.
La resta.
Nosotros menos tú,
igual a mi soledad.

lunes, 26 de marzo de 2012

CONDENADOS A ENGAÑARNOS

Dejemos las noches de luna llena para los amantes.
Aceptemos que nuestro amor está castigado a la clandestinidad de los callejones,
al olor de la sangre que huye tras el primer navajazo,
a los insultos de las putas estafadas por sus clientes.

Dejemos los besos del amanecer para los enamorados.
Conformémonos con los nuestros, con sabor a resaca,
con nuestros abrazos tan suaves como el granito,
con los “te quiero” que escapan de nuestros labios por efecto de la novocaína.

Dejemos que el amor viva en quien lo merece.
Arrastremos eternamente la condena de soportarnos
para hacer más llevaderas las noches de luna llena,
que nunca serán nuestras, porque pertenecen a los que aman.

Mientras, tú y yo continuaremos condenados a seguir engañándonos.

domingo, 25 de marzo de 2012

¿QUÉ MÁS PRUEBAS NECESITAS?

Asistiría cantando feliz a mi ejecución, si tú fueras mi verdugo. Me lanzaría a las llamas sabiendo que eres tú quien encendió la chispa y avivará el fuego. Cortaría mis venas sin pensarlo si tú me entregaras la cuchilla. Bebería de la copa que me ofrecieras olvidando que te vi echar el veneno.
 
Recorrería el mundo buscando todos tus caprichos fútiles, dejándome la vida en cada intento. Caminaría sobre las aguas para dejarte en un lugar seguro en la otra orilla. Dejaría de dormir para velar tu sueño y espantar tus pesadillas.
 
Pondría mi vida en tus manos, sin importarme qué hicieras con ella. Haría todo lo que me pidieras y más. Lo imaginable, lo inimaginable. Lo posible, lo imposible. Incumpliría todas las leyes, humanas y divinas, para hacerlo.

Ahora, dime, ¿qué más pruebas necesitas para estar segura de que te quiero?  


sábado, 24 de marzo de 2012

A VUELAPLUMA (XLIV)

Ni me retiré ni me rendí. Nunca estuve en la carrera…

 ***

Cada vez que te veo, reconozco en mí los síntomas del síndrome de Stendhal.

 ***

Sabré que me he equivocado en mi elección la primera vez que busque tu mirada en sus ojos.

viernes, 23 de marzo de 2012

PIENSA EN MÍ CUANDO TODO VAYA MAL

Si alguna vez, maltratada por la vida, buscas un refugio, piensa en mí. Sabes que aprendí a abrazar solo por ti, por si algún día lo necesitabas. Y, para ti, mis brazos siempre estarán esperando que hagas de ellos tu hogar.

Si algún día habitas en el olvido de todos, piensa en mí. No he dejado de pensar en ti por si llegaba ese momento. Siempre te dije que tenías algo que te hizo inolvidable para mí.

Si alguna vez el amor no te alcanza y pueda parecerte que te ha abandonado, piensa en mí. Todo el amor que te profesé, seguirá intacto, esperando que llegue la ocasión y quieras quedártelo y vivirlo conmigo.

jueves, 22 de marzo de 2012

NO ESTAMOS HECHOS EL UNO PARA EL OTRO

No eres la mujer de mi vida, ni yo el hombre de ninguna.
Pero hasta que nos demos cuenta,
concédeme el privilegio de ser yo al que saques a tus bares las noches de los jueves
que desees mezclarte con los cuerpos sudorosos de los jóvenes danzantes;
apurémoslas enteras, hasta la última gota,
y dejemos que vuelva a funcionar la química en nuestros cuerpos.

No estamos hechos el uno para el otro.
Pero hasta que seamos conscientes de ello,
sigamos fingiendo que nos queremos,
llenando los días, cubriendo vacíos,
susurrándonos canciones, restañando nuestras heridas,
riéndote de mis chistes, alabando tus versos.

No. No sé cómo llegamos a conocernos.
Quizá porque los perdedores estamos condenados a encontrarnos.
Pero aprovechemos el momento para ahogar las penas en el fondo de los vasos,
ahorquemos los malos recuerdos en el árbol del olvido,
arrojemos a la hoguera las vanas esperanzas que nos dieron
aquellos que alguna vez nos prometieron amor eterno.

No debimos ni encontrarnos.
Pero hasta que nos hastiemos el uno del otro,
continuemos abrazándonos las noches sin luna,
acariciando cicatrices, besándonos con furia,
haciendo el amor a deshoras,
arriesgándonos a morir de una sobredosis de almíbar.

miércoles, 21 de marzo de 2012

ELLA SIEMPRE SERÁ LA DUEÑA DE MIS 17 SÍLABAS (I)

HAIKU 37 (DECLARACIÓN DE INTENCIONES)
Mis diecisiete
que rezumen amor,
te pertenecen.

HAIKU 38
Tenaz almendro
que matas el silencio,
llévate el frío.

martes, 20 de marzo de 2012

OTRA REFLEXIÓN. OTRO DÍA TONTO

“Te olvidaré, lo juro, lo siento,
Tu amor me hace daño,
Y esto no puedes ya arreglar.
Pero amor como el mío no hallarás por ahí,
Porque este amor apuesta hasta por mí.”

Obviando que éramos perfectamente incompatibles, ella era ideal para mí y hubiera podido ser lo que hubiese querido ser en mi vida. Yo siempre supe lo que me hubiera gustado que fuera. Para no volverme loco, prefiero creer que ella escogió ese lugar en el que se quedó en mi vida. Ojalá que allí donde quiso quedarse se encuentre cómoda y le llegue mi calor. Quiero pensar que ella no quiso ser más de lo que fue. No habría cosa que me doliera más que alguno de los dos tuviéramos que arrepentirnos de nuestras decisiones. Ella, de la suya de no dejar que me acercara. Yo, de la mía de alejarme. Porque en la vida no hay botón de rebobinado y dudo que estuviera dispuesta a concedernos otra oportunidad después de desaprovechar todas las que nos dio.

lunes, 19 de marzo de 2012

PROMESA CUMPLIDA

Apareces en tromba, inesperadamente,
Llevándote el frío,
Envolviéndome en tu abrazo,
Jugando con mi pelo,
Anidando en mi pecho.

Nadando en tu mar,
Dejo atrás todos mis recuerdos.

¿Regresarás otra noche
A seguir espantando nuestros fantasmas?

domingo, 18 de marzo de 2012

UNA NOTA SUELTA (XXI)

Todos mis despertares, hasta mi último día, tendrán las mismas preguntas: “¿Hice todo lo que pude? ¿Pude haber hecho más? Si hubiera hecho las cosas de otra manera, ¿hubiera cambiado algo?” Todos mis amaneceres tendrán el mismo lamento: “¡Joder, lo que me perdí!” Solo espero que en ninguno de los suyos se llegue a preguntar si nos perdimos algo. Aunque dada mi tendencia al masoquismo, a hacerme daño porque sí, porque creo merecerlo, si eso llegara a ocurrir, si se lo llegara a preguntar, fuera cual fuera la respuesta que se diera a sí misma, me gustaría que me lo dijera, saber si aquello que hice lo hice bien o que no era el momento adecuado o que nada de lo que hubiera podido hacer y de la manera que lo hiciera, habría hecho que el final fuera distinto, porque el problema soy yo.

sábado, 17 de marzo de 2012

A VUELAPLUMA (XLIII)

Toda nuestra historia puede escribirse en el reverso de un sello de correos.

***

¡Qué desgarrador darnos cuenta un día de que lo nuestro fue la historia más grande jamás vivida!
***

Aunque de nuestra vida en común hubieras hecho un infierno, yo hubiese ardido en ese fuego.

***

Ibas para amor de mi vida. Te has quedado en una línea más de de la lista de cosas que he de olvidar con urgencia.

viernes, 16 de marzo de 2012

PREPARADO PARA EL EXORCISMO

Aunque mi corazón no quiera
he de sacarte de mi cabeza.

Aunque no quiera mi corazón
y me cueste perder la razón
he de sacarte de mi vida,
olvidar que te conocí.

Aunque mi corazón no quiera
he de sacarte de mi cabeza.

Aunque me derrita en tu presencia,
aunque se desboque el caballo de los nervios,
he de decirte adiós,
irme acostumbrando a tu ausencia.

Aunque mi corazón no quiera
te arrancaré con mi cabeza…

jueves, 15 de marzo de 2012

QUIZÁS EN OTRA VIDA. (NATURALEZA MUERTA)

“Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos.”
Julio Cortázar
Entraste en mi vida con la fuerza de un vendaval. No me costó nada enamorarme de ti. La primera vez que te vi, supe que eras tú a quien llevaba buscando toda mi vida. Fue como si te conociera desde siempre. Fue fácil llegar a amarte. Ahora necesitaría cien vidas para lograr olvidarte.

Fui el tipo más feliz del mundo el tiempo que pasamos juntos. Me bastaba estar a tu lado para volver a sonreír, para olvidar todo el sufrimiento padecido.

En una ocasión me preguntaron qué parte de ti habría querido ser. Sin pensarlo, contesté inmediatamente que una palabra tuya, para estar un momento, aunque efímero, en tu boca. Cuando me paré a pensar, cambié mi respuesta y dije que, de haber podido, yo hubiese escogido ser una lágrima tuya. Salir de tu corazón, nacer en tus ojos, recorrer tus mejillas,  morir en tus labios... (¿Se te ocurre un lugar mejor donde morir?) Y, así, volver otra vez dentro de ti.

Si cuando nuestras vidas acaben vuelves al mundo de alguna manera, regresa convertida en una roca en la orilla de cualquier playa. Yo pediré ser mar para vivir en perpetua marea alta y poder besar, por fin y para siempre, tu boca.

Cuando la curiosidad te venza, y te preguntes cuánto te llegué a querer, no tienes más que contar todos los granos de arena de todos los mares, de todos los ríos y sumarlos a todos los que hay sobre la tierra. Y, aun así, no habrá suficientes  para que te hagas una idea de todo el amor que sentí, y siento, por ti.

A mí me quedará siempre la gran duda. ¿En el lugar en el que estás ahora, has perdido un solo segundo de tu valioso tiempo en pensarme? De las dos respuestas posibles, preferiría el no. Sería menos doloroso y, a la vez, más esperanzador...

Entraste en mi vida con la fuerza de un vendaval. Estás saliendo de ella como brisa de agosto. Ligera, húmeda…

En este paraje, en medio de la nada, que me dejaste, a esta muerte que llega, -tan lenta, tan amarga, tan profesional-, también se le sonríe…


miércoles, 14 de marzo de 2012

UN ÚLTIMO FAVOR

Hazme un favor. Un último favor. Borra, inmediatamente, esa sombra de preocupación de tu mirada. Te prometo que estaré bien. Que ya sé que fuera de ti hace frío, mucho frío. He vivido la mayor parte de mi vida sin ti y, hasta que te conocí, solo he conocido este frío que, como siempre, está esperando que vuelva a sumergirme en él. Pero, aun así, sin tu presencia, estaré bien. Me comprometo a ello. A estar bien por ti. Por si te ayuda a estar bien. ¡Jodido presuntuoso! ¡Imaginar que, por un solo momento, alguna vez fui importante en la vida de otros! ¡Pensar que, porque yo no esté, tú vas a estar mal!

Hazme un favor. No te pediré más después de este. Vuelve a sonreír. Con esa sonrisa que ha iluminado cada uno de mis días estos últimos años. Gracias a ti y a tu sonrisa he podido confirmar lo que sospechaba. Que uno nunca se olvida de cómo se quiere. Y yo sé querer. Puedo querer. Solo nos faltó comprobar si me hubiera dejado querer.

Aunque ya sé que no me asiste ningún derecho para hacerlo, hazme un favor. El último que te pido. Ríe. Donde quiera que estés. No dejes de reír nunca. Que en el lugar en el que me encuentre me llegue siempre el sonido de tu risa. De esa forma, yo estaré bien. Que cuando tú reías se disipaban todas mis sombras. Porque mientras tú rías, siempre habrá lugar para la esperanza y podré seguir imaginando que, entre nosotros, todo lo mejor está aún por suceder.

martes, 13 de marzo de 2012

UNA NOTA SUELTA (XX)

La experiencia nos dice a cada uno cuándo hay que poner fin a las cosas, cuándo termina su tiempo. Cuándo tiene uno que retirarse para dejar de ser una molestia. Y tiene que empezar a despedirse de las vidas en las que una vez cree que estuvo. Primero de aquellas en las que no ha sido más que una anécdota, un accidente, algo circunstancial; dejando para el final las que son importantes para él. Hay que cerrar capítulos. Incluso los que no se empezaron a escribir. Y, ahora, creo intuir que es el mejor momento para comenzar a hacerlo.


lunes, 12 de marzo de 2012

LO QUE QUEDA DE NOSOTROS

Entre tú y yo
distancias insalvables, frentes fríos,
fuego líquido, bajas presiones,
hielo ardiente, ausencia de anticiclones,
parques sin niños, horas vacías.

Entre tú y yo
risas congeladas, llantos secos,
noches de pánico, días negros,
nuestros nombres olvidados, parálisis del sueño.

Entre tú y yo
sobres sin remite, cartas en blanco,
trenes sin destino, París sin turistas,
palabras huecas, sonrisas de compromiso.

Entre nosotros inabarcable silencio,
este gélido cierzo,
mi futuro sin promesas,
el tuyo lleno de vida.

Entre tú y yo
otros labios, otros brazos,
otras piernas en las que enredarte,
otro cuerpo en el que perderme.

Entre tú y yo, estos dos metros de tierra,
que hoy me arropan.

domingo, 11 de marzo de 2012

MI AHORA.

Sé que solo existe el ahora. Y mi ahora son tus ojos tan azules, tu cálida piel blanca sembrada de pecas, tu lengua obligando a mis labios a abrirse para que la reciba la mía, tu pecho latiendo sobre el mío, mis manos por debajo de tu ombligo, mi boca calmando su sed en tu fuente…

Sé que solo existe el ahora. Y mi ahora es ausentarme de todo y de todos, ver mi reflejo en tus ojos, hacer inventario diario de tus pecas, susurrarte al oído canciones, hacer que se pierdan mis dedos por tu cuerpo…

Sé que solo existe el ahora. Y, ahora y para siempre, mi ahora eres tú.


sábado, 10 de marzo de 2012

A VUELAPLUMA (XLII)

Este período de oscuridad no puede ser para siempre.

***

Te quiero. Con premeditación y alevosía.

***

Pero olvidaré que te quiero para ser feliz con quien me merezca.

***

Si bastara con arrancarme los ojos para no volver a verte…

viernes, 9 de marzo de 2012

UNA VEZ POR SEMANA

De martes a martes,
como dos viejos amantes,
así nos vemos.

Como si estuviera prohibido,
escondiéndonos del mundo,
hablándonos quedo.

De martes a martes,
como dos viejos amantes,
así nos vemos.

De semana en semana,
en eso han quedado
los sueños que un día tuvimos.

De martes a martes,
como dos amantes clandestinos,
así pasa ahora nuestro tiempo.

Todas las semanas,
de martes a martes,
excepto las que tú no quieres
y las que yo me castigo sin verte.

Pero, a modo de disculpa,
todos los días te escribo una carta.
Cartas que nunca lees
porque te llegan los sábados.

jueves, 8 de marzo de 2012

¡QUÉ ERROR!, ¡QUÉ INMENSO ERROR!

Sabiendo que nunca sucederá por mucho que pueda desearlo, no puedo dejar de imaginar conversaciones que desembocan siempre en confesiones susurradas al oído, roce del movimiento de dos cuerpos contra las sábanas, palabras húmedas, el corazón queriendo escapar del pecho…

Sabiendo que hay situaciones que nunca se darán entre nosotros, no puedo dejar de imaginar amaneceres en tu azotea, esos besos en tus párpados que siempre deseé darte, tu cuerpo jugueteando con mis dedos,…

Sabiendo que los sueños no se cumplen, no puedo dejar de imaginar baños en tu mar, mi cabeza en tu regazo, tu boca por debajo de mi línea de flotación, vivir dentro de ti…

¡Qué error no poder dejar de imaginar que utilizas mi cuerpo de cortavientos cuando el cierzo te da de cara!

¡¡¡Qué inmenso error seguir enamorado de ti!!!

miércoles, 7 de marzo de 2012

ANTES DE QUE ME PIERDAS DE VISTA

Antes de que zarpe tu barco y me pierdas para siempre, quizá debería decirte que, entre tu equipaje, he escondido mi vida. Cuando deshagas tu maleta y la encuentres, átale un lastre y lánzala a lo más profundo del océano. ¿Para qué la quiero si no voy a vivirla contigo?

Antes de que tu barco enfile hacia el horizonte, llegue a confundirse con él y habites en la frontera que separa el recuerdo del olvido, tal vez debería decirte que no tendría que haberme movido de la casilla que ocupaba antes de conocerte y así no haber traicionado mis promesas y no haberme causado este dolor.

Antes de que tu barco llegue al destino que tú has marcado para pasar el resto de tu vida, y antes de que este dolor me consuma, debería haberte hecho saber que todos los días acudiré al puerto donde estoy hoy a recibir noticias tuyas, con la esperanza de que el práctico me informe que está pronto tu regreso. Y que, esta vez, será para quedarte.

martes, 6 de marzo de 2012

PALABRAS QUE SÍ. PALABRAS QUE NO

PALABRAS QUE NO TIENEN QUE ESTAR EN MIS VERSOS
 
Nosotros. Tu nombre. El mío a continuación. Bienvenida. Vida. Presente. Futuro. Sonrisa. Alegría. Valentía. Osadía. Felicidad. Abrazos. Caricias. Besos. Amor. Susurros. Corazón. Éxito. Luz. Música. Cielo. Estrellas. Sol. Luna. Tálamo. Latidos desbocados. El sudor causado por el amor. Tus pechos buscando mis manos. Mi boca en tu manantial…


PALABRAS QUE DEBERÍAN ESTAR EN MIS VERSOS

Dolor. Oscuridad. Desasosiego. Desesperación. Desierto. Muerte. Apocado. Miedo. Dos metros de tierra sobre mí. Cementerio. Vacío. Olvido. Ataúd. Nicho. Abismo. Precipicio. Ausencia. Seco. Agostado. Marchito. Fracaso. Ruido. El sudor de la pesadilla. Mis dedos en tu espalda. Tus labios buscando los míos. Mi nombre. El tuyo al lado. Nosotros…

lunes, 5 de marzo de 2012

REENCUENTRO

El sábado por la noche, tras más de veinte años sin saber el uno del otro, volvimos a encontrarnos. Al principio, nos miramos recelosos. Tantos años sin vernos minó nuestra confianza. Nos costó soltarnos y preguntarnos qué había sido de nosotros en todo ese tiempo. Superados esos momentos iniciales de recelo y desconfianza, nos dimos cuenta de que todo seguía parecido, cuando no igual, a como era entonces.

El sábado por la noche, tras más de veinte años sin hacerlo, volví a fumar marihuana. Y, sí, parece que, por fin, encajan de nuevo todas mis piezas y mi vida vuelve a ser como antes. Todo vuelve a tener sentido…


domingo, 4 de marzo de 2012

BORRADOR (LIGERO ESBOZO)


Soy de los que aún escribe con pluma y en papel, aprovechando todo el espacio, de izquierda a derecha y de arriba abajo. No sé si eso quiere decir algo. Lo que sí noto es que, según mi estado de ánimo, el tamaño de mi letra varía y cambio la orientación de mi firma.

Acepto la derrota con deportividad, con naturalidad, como una parte del juego que es la vida. Sé perder, porque las pocas veces que he ganado me he comportado de la misma manera. Estrechando la mano al destino y citándonos para el próximo partido.

Siempre sé cuál es mi sitio, el que los demás reservan en sus vidas para mí. Y cuando alguien me ha dicho que debería alejarme un poco, lo he hecho sin pensarlo, para dejar de molestar y dar el espacio que me pedían. Porque sé que, en caso de ser yo el que lo pidiera, harían lo mismo por mí.

De igual manera, cuando he necesitado que alguien volviera a estar a mi lado, he ido en su busca, sin vergüenza ni miedo al rechazo. Supongo que, en caso contrario, harían lo mismo conmigo.    

Acudo raudo a la llamada del que me necesita, sea por la pena o por la alegría. Aunque sea alguno de los que me pidió distancia. No puedo dejar de querer, no sé dejar de querer. No quiero dejar de querer.

A grandes rasgos, así soy yo.






sábado, 3 de marzo de 2012

A VUELAPLUMA (XLI)

Sí es verdad eso de que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. Al menos a mí me ha ocurrido varias veces, que he valorado lo que tenía cuando ya lo había expulsado de mi vida. Me pregunto si a alguien le ha pasado eso cuando he sido yo el desaparecido, el desterrado.
***

Mi vida, ahora, es ir olvidando primaveras…

***

No fue tan traumático, tan doloroso, superar mi adicción a la cocaína como me está resultando tratar de olvidarte.

viernes, 2 de marzo de 2012

MI FRACASO PERSONAL.

Tú. La que hizo aletear a mis mariposas. La que llenó todas mis horas con sus risas. La que desordenó mi vida. La que aclaró mis ideas.

Tú. La que hizo que sonaran las más bellas melodías en todos nuestros días. La que hizo que la luz se filtrara hasta el rincón más recóndito de mi alma.

Tú. La que no quiso mi amor.

Pero no te preocupes. Te prometo no dárselo a nadie. Lo guardaré siempre por si alguna vez cambias de opinión y vienes a reclamarlo.

Tú. Mi auténtico fracaso personal.


jueves, 1 de marzo de 2012

CUANDO YA NO ESTÉ

Me extrañarás.

Lo sé.

En las noches que no fueron,

en las que no quisiste que tuviéramos.



Me buscarás.

Estoy seguro.

En todas la caras de la luna,

en los parques sin niños.



Me echarás de menos.

A veces con desesperación.

En el objetivo de tu cámara,

en tu paleta de colores.



En el fondo de los vasos

me echarás de menos.

En los hielos al derretirse

me extrañarás.



Y aunque siga manteniendo

este sentimiento dentro,

habrá caducado nuestro momento.



Lo intuyo.



Me buscarás, todas tus mañanas,

en el envés de tus sábanas.



Lo sabes.