sábado, 4 de febrero de 2012

NÚMERO OCULTO

Te llamo con número oculto
y, para qué negarlo,
una pizca de desesperación
solo para oír tu voz,
que no quede sepultado
tu recuerdo por los que voy acumulando
desde la última pesadilla
de la que aún no he despertado.

Te llamo con número oculto,
una, dos, cien veces,
hasta hacer que tu voz suene más fuerte
que la alianza de mil tormentas
y resuene en mi cabeza
hasta mi próxima crisis.

Te llamo con número oculto,
completamente inmóvil,
aguantando la respiración,
reprimiendo el deseo de decirte
que aún te quiero,
que no puedo dejar de quererte.

Te llamo con número oculto,
como el perfecto cobarde que soy.
Para despedirme.
Sin dar la cara.
Con la luz apagada.
En silencio.

Te llamo con número oculto,
al borde de la desesperación,
consumiendo el último gramo de esperanza
que se resiste a abandonarme.
Mi última llamada,
Mi adiós definitivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario