Cuando soñaba nuestros sueños despertaba con una sonrisa. Ahora sólo tengo pesadillas.
***
Hay veces que concedernos un capricho puede arruinar el resto de nuestra vida.
***
Podríamos haber llegado a hacer un trato: Yo podría haber llenado sus aburridos domingos y, a cambio, ella podría haber hecho desaparecer las tediosas ciento sesenta y cinco horas que estaba sin verla.
***
Hay dos razones por las que reprimía mis ganas de besarla, por las que nunca me atreví a robarle un beso. Una por ella. Porque la respeto demasiado para hacer algo que no deseaba. Y otra por mí. Porque si le hubiera dado un primer beso no hubiese podido parar de besarla.
***
No hay nada que llegara a dolerme más que dentro de unos años preguntarnos qué hubiera sido de nosotros si nos hubiéramos decidido a compartir nuestras vidas, a vivirlas juntos.
***
Últimamente sólo he tenido ideas sin sentido y me he hecho preguntas que nunca tendrán respuesta. Y si algún día hay respuestas ya habré olvidado las preguntas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario